La lujuriosa empleada Satomi Suzuki llegó a la empresa a trabajar a tiempo parcial un domingo. Debido a su intensa excitación y al momento en que la empresa estaba vacía, no dudó en masturbarse de inmediato para satisfacer sus necesidades. Pero en ese momento, un colega también vino a trabajar a tiempo parcial y vio esa escena. Simplemente se quedó tímidamente y la miró con ojos hambrientos pero no se atrevió a entrar. Por supuesto, Suzuki también lo sabía, pero tal vez sentía algo por él y quería atraerlo, así que no sólo no se detuvo, sino que continuó masturbándose. Hasta que a la mañana siguiente, cuando llegó muy temprano a la empresa para prepararse para el trabajo asignado por el director, ella apareció de repente y le hizo proposiciones. Habiendo comprendido sus intenciones antes, todavía trató de actuar con timidez, pero de hecho, en su corazón, también se sentía muy feliz porque no tenía esposa y nunca había experimentado la sensación de hacer el amor. Después de eso, los dos tuvieron relaciones sexuales en la empresa y luego volvieron a trabajar con normalidad como si nada hubiera pasado.
